- La campaña “Guanyem un estiu lector” beneficia a más de 35.000 niños y sus familias, proporcionando materiales para fomentar la lectura durante las vacaciones
- Abacus colabora ofreciendo 10 suscripciones a la revista Petit Sàpiens, distribuyendo 3.000 kits lectores en las tiendas y potenciando los espacios de lectura en las librerías con recomendaciones y actividades
- Durante el verano, los niños que no leen pueden perder hasta un 30% de lo aprendido durante el curso escolar
Por segundo año consecutivo, Abacus colabora con la campaña "Guanyem un estiu lector", liderada por la Fundació Bofill en el marco del programa Lecxit. Esta campaña, que beneficiará a más de 35.000 niños, proporcionará materiales y orientaciones para fomentar la lectura durante las vacaciones, con el objetivo de mantener el hábito lector y prevenir la pérdida de aprendizajes.
Durante la duración de la campaña, Abacus sorteará 10 suscripciones a la revista Petit Sàpiens, distribuirá aproximadamente 3.000 kits lectores (Carnet Lector y Orientaciones para la familia) en sus tiendas, que potenciarán los diferentes espacios lectores de las librerías a la vez que organizarán actividades relacionadas para que los más pequeños puedan disfrutarlo durante el verano. La presidenta de Abacus, Maravillas Rojo, afirma que "para Abacus, el fomento de la educación y la lectura son ejes prioritarios de nuestra actividad". Rojo añade que desde la cooperativa "tenemos un firme compromiso en colaborar con aquellas medidas dirigidas a mejorar el nivel lector de los niños catalanes", sobre todo si se tiene en cuenta la correlación directa entre este factor y su éxito educativo, puesto que se ha demostrado que tener un bajo nivel de comprensión lectora dificulta la adquisición de conocimientos y habilidades en otras áreas curriculares.
La campaña también cuenta con el apoyo de otras organizaciones como Cavall Fort, el Consorcio de Bibliotecas de Barcelona, la Red de Bibliotecas Municipales y el Servicio de Bibliotecas de la Generalitat, y por primera vez incorpora una actividad específica para vincular a los niños catalanes en las bibliotecas públicas.
Por qué incentivar la lectura durante el verano
Las vacaciones de verano representan una época de descanso y diversión en la que muchos niños y niñas tienen experiencias fuera de la escuela que les suponen un enriquecimiento personal. En cambio, para otras vacaciones pueden significar un retroceso en su progreso académico porque no disponen de un entorno estimulante. Según investigaciones promovidas por la National Learning Association en EE.UU., los niños que leen en verano aumentan el nivel competencial en lectura, mientras que los que no lo hacen sufren un descenso considerable, que en algunos casos supone un 30% de los aprendizajes adquiridos durante el curso.
Esta proporción entre colectivos lectores y no lectores se ve agravada según los distintos estratos socioeconómicos. En el caso de Cataluña, el 31% de los niños que tienen menos de 25 libros en casa tienen una diferencia de más de un curso escolar respecto a los que tienen más de 200 libros en casa, que son sólo el 16% de los niños. La pérdida de aprendizajes durante el verano, pues, afecta desproporcionadamente a los niños de familias con menos recursos, ampliando la brecha existente en sus habilidades lectoras.